Figura 4. Dermatoscopia de un carcinoma basocelular, mostrando vasos telangiectásicos bien enfocados superficiales y algunas zonas de erosión superficial.
Figura 4. Dermatoscopia de un carcinoma basocelular, mostrando vasos telangiectásicos bien enfocados superficiales y algunas zonas de erosión superficial.